¡El éxito ya está en ti, encuéntralo!
Veo el mundo y con asombro vienen a mi mente infinidad de preguntas, muchas de ellas sin respuestas. Preguntas con sentido para algunos, para otros tan solo interrogantes sin significado ni entendimiento. Por momentos, creo que es mejor que sea así y definitivamente para el ser humano quizás sería mucho más sencillo de esta manera.
¿Tener o no tener? Dinero, reconocimiento, prestigio, amor, bienestar… Disyuntiva que nos pone en aprietos emocionales en determinadas situaciones, frecuentemente nos cuestionamos qué quiero, qué tengo, por qué tan poco, si tan solo… Considero que lo más importante es cuál es el camino, cuál es la salida y cómo se puede lograr el objetivo.
Generalmente, solemos mirar lo que tiene el otro, cuestionamos incluso cómo lo logró, cómo lo obtuvo, hacemos juicios sin valor alguno, juzgamos a la ligera. Y me pregunto de nuevo, así soy realmente, no, así somos todos, o al menos la mayoría en algún momento lo fue. El daño que nos hacemos es invaluable y que pena vivir así, es darnos cuenta que los días se nos van viviendo otras vidas y persiguiendo sueños que al final no son los nuestros.
Hoy te invito a que vivas en paz y en plenitud. A que seas tú mismo, sin mirar a los lados y caer en banales comparaciones, que más allá de traerte un aprendizaje encontrarás un profundo vacío que no te dejará vivir. Identifica esas creencias y costumbres tóxicas arraigadas, que en el fondo hacen daño y aunque cueste, atrévete a romper paradigmas. Y si en el proceso notas dolor, ese dolor es parte del camino. Además, quién ha dicho que el cambio es fácil, para nadie lo es, tan solo permitirte vivir así. Te darás cuenta que al poco tiempo, ese pequeño gran paso será la mayor satisfacción de que has logrado algo con firmeza y empoderamiento.
Y ahora vamos más allá… Será que el tener o no tener, forma parte de alcanzar el éxito, sin duda que sí, esa búsqueda permanente del “éxito” está fundamentada en ser tú. Aprender a identificar las fortalezas y puntos de mejora, en qué eres bueno y reconocerte como ser humano, es palpar objetivamente tus habilidades mentales, emocionales y encaminarlas al plano profesional asertivamente.
¡Escuchar tu corazón y prestarle atención!
Para algunos, el éxito puede ser acumular una fortuna o ser un gran gerente. Para otros, el éxito podría ser encontrar el amor y tener una familia, puede ser recobrar la salud e incluso dedicar su vida a las luchas sociales. Todas estas visiones son correctas. El éxito debe ser lo que verdaderamente te hace feliz, brinde paz y bienestar. Estableciendo nuestras propias metas y no la que otros fijen para nosotros.
Éxito es contar con el apoyo de personas que funjan como mentores, guías, ejemplos, esa energía extra que en algún punto necesitamos todos para avanzar. Mentor es esa persona que elijes simplemente para que sea la luz que acompañe la tuya en el camino.
Éxito es andar con cautela y prudencia, es caminar despacio valorando lo que tienes, anhelando lo que deseas, pero con la precaución de obtenerlo con la sabiduría necesaria del momento.
Éxito es valorar y agradecer lo que por gracia te corresponde, es mirar al cielo y dar por hecho que mereces eso y más, para ello necesitas ser agradecido al universo en el cual hoy vives.
Éxito, es proyectarte de la mejor manera. Es mantenerte enfocado en la meta y perseguirla con tenacidad, sin poner en peligro tu esencia y sobre todo, ser coherente y congruente, pues, lo que sientes, piensas, dices y haces, debe ir en armonía con tu comportamiento diario. La coherencia cómo nos salvaría de grandes problemas no.
Por tanto, éxito es amanecer todos los días agradeciendo que respiras, que estas rodeado de cosas hermosas, que vives en un mundo donde lo tienes todo. La cuestión es, realmente te detienes y lo valoras, lo disfrutas, lo sientes. ¿Estas presente en tu presente? Si las respuestas a estas básicas y cortas interrogantes, son sí, puedes estar seguro que el éxito lo has conseguido, lo demás serán añadiduras de la vida para un vivir esplendido.
Finalmente, éXITO no es más, que si mañana tienes que partir, todo estará bien, porque tú, hoy estás bien.
(El éxito ya está en ti, encuéntralo)