Dejar una huella positiva en las personas es mi propósito

Como líder, debemos invitar a otros a tomar acción y enfrentar los desafíos con determinación y creatividad.
 
Con 29 años de trayectoria en el área de Talento Humano, Patty Sánchez, tiene como propósito, ‘‘ayudar a otros a ver su máximo potencial como seres humanos integrales. Dejar una huella positiva en las personas que me rodean en lo familiar, personal y profesional. Contribuir a dejar un mundo mejor, desde lo que he aprendido en la vida y sigo aprendiendo’’.
 
Para Patty, ser líder es una experiencia maravillosa, sobre todo por el nivel de aprendizaje constante. ‘‘Si tuviera que definir mi experiencia como líder en tres frases (3 palabras se me complican): Orientar desde mi experiencia profesional, siendo flexible y abierta para escuchar otras opiniones; Accionar e invitar a otros a la acción: no creo en escenarios perfectos, creo en la acción como fuente de logros y enseñanzas. Riesgos calculados a través de análisis estructurados, pero con el componente humano; Inspirar: tocar el corazón y la mente de alguien con mi gestión, lo cual pueda ser un empujón para diseñar su propio estilo de liderazgo’’.


‘‘El mayor desafío es ser un líder justo, no importa el género. La justicia te da la base para minimizar subjetividades innecesarias en el ecosistema organizacional y te conecta con la confianza de tu equipo, figuras superiores y colaboradores. Como mujer mi reto más grande, es hacer valer mi criterio frente a la perspectiva del negocio, afortunadamente tuve buenos mentores, particularmente una mentora que me formó en determinación y temple, y donde la exigencia constante era la preparación y la recursividad. Estos dos últimos son mis armas para debatir con las unidades de negocio, lo que fuera. Existe la errada percepción que el Talento Humano es solo un gasto y resulta que es lo más sensitivo de una estrategia sostenible en el tiempo, y se puede demostrar con números’’, expresa Patty.
 
A las nuevas generaciones de mujeres lideres, Patty les aconseja, ‘’el valor de una gestión se demuestra desde la autenticidad, el criterio profesional claro y sobre todo la conexión como seres humanos. Me atrevo a afirmar que  existen emociones y sentimientos en el mundo organizacional y reconocerlo es maravilloso. No es necesario masculinizarnos para ser escuchadas, busquen la manera de que su voz resuene tan fuerte que no exista otra opción sino la de escucharlas. El foco en la gente no puede convertirse en una frase de moda, debe ser el epicentro de la estrategia organizacional. Vayan por lo disruptivo, lo que multiplique el valor, lo que deje huellas y no cicatrices. Aprendan cada día, anticipen situaciones, sálganse intencionalmente de su zona de confort y por supuesto regalen sonrisas y abracen con empatía. Dice Albert Einstein: “La vida es como montar en bicicleta. Para mantener el equilibrio tienes que avanzar” …entonces: Avancen’’.
 
''Les regalo una pregunta poderosa: ¿Estoy dando lo mejor de mí?''