El recaudo tributario es una de las asignaturas pendientes por las que más se han hecho reparos a este gobierno, ya que las proyecciones que se hicieron para el 2024 no se han cumplido y esto llevó a que se tuviera que bajar los montos de gasto en el Presupuesto y actualmente se mantengan las presiones en la caja de la Nación y la urgencia de plata siga preocupando a las autoridades fiscales.

Si bien ya se tiene detectado que esto sucedió por errores como sobreestimar las capacidades de la Dian y apuntarle a ingresos por litigios y arbitramentos que no se cumplieron, parece que la lección no quedó aprendida y los errores del pasado se volverán a cumplir si todo sigue al paso que va, ya que, en voz del mismo Carf, se depende de ingresos inciertos que mantienen el riesgo de subir el déficit.

Que se dependa de una ley de financiamiento por $12 billones, el lento paso que lleva la economía y que se estén generando expectativas más altas de las que puede cumplir la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales; son parte de las amenazas que se ciernen en el panorama, sin contar que el recaudo de la vigencia en curso se mantendrá a la baja y no llegará ni siquiera a la meta ajustada.

El equipo de investigaciones económicas de Corficolombiana presentó esta semana una revisión de la situación actual del país frente a la recolección de impuestos y aseveró que será poco probable que se cumplan los objetivos trazados en el Marco Fiscal de Mediano Plazo, dado que las condiciones son poco favorables y la dinámica en este frente no muestra señales de recuperación.

Dian

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Estos investigadores plantearon tres escenarios (optimista, medio y poco favorable), en los que a diferencia de proyecciones pasadas, ya no se percibe la posibilidad de que se pueda cumplir la meta de recaudo, ni siquiera con el ‘milagro tributario’ que algunos analistas decían, semanas atrás, que tenía posibilidad de suceder.

“Según la información de la Dian, el recaudo total en agosto fue de $15,9 billones, registrando una caída del 31,5% anual, lo cual representa el segundo mayor retroceso del año y un deterioro peor al registrado durante la pandemia. En los primeros ocho meses del año, el recaudo total suma $177,9 billones, cayendo un 9,7% frente al mismo periodo del año anterior, resultando ser una caída superior en 2 puntos porcentuales a la percibida durante la pandemia entre enero y agosto”, manifestaron.

Dicho esto, la primera posibilidad, en un escenario base o riesgo medio, es que el recaudo dejará de caer en términos anuales entre septiembre y diciembre, proyectando un total de $246,4 billones al cierre de 2024, lo que supone una diferencia de $12 billones por debajo de la meta del Marco Fiscal.

“En un segundo escenario, más optimista, asumimos que el recaudo crece 5,6% anual en los últimos cuatro meses del año, es decir, similar a la inflación que esperamos para cierre de año, lo que implica un crecimiento real cercano a cero. En este caso, el recaudo de 2024 sería de $251 billones y el faltante frente a la meta del Mfpm sería de $7,6 billones”, indicaron desde Corficolombiana.

Por último, en una visión no tan favorable, que podría suceder, desde Corfi plantean una situación en la que que el recaudo mantiene el ritmo de caída de 9,7% anual en el último cuatrimestre, con lo cual terminaría el 2024 en $238,5 billones y el faltante ascendería a $20,2 billones y para compensar esto dicen que será necesario un ajuste adicional del gasto del gobierno en 2024 de entre 0,4% y 1,2% del PIB.

Jairo Villabona, director de la Dian

Cortesía - Dian

No obstante, dejan claro que este ajuste puede no ser explícito, sino a través de una menor ejecución del Presupuesto General de la Nación de este año, tal y como se ha venido observando en los últimos meses.

Corficolombiana también le dio un vistazo a cómo viene el 2025 en materia tributaria, recaudo y manejo de los ingresos y allí sostuvo que el panorama es aún más retador, ya que los ingresos que espera el gobierno para financiar el Presupuesto incluyen fuentes inciertas y supuestos demasiado optimistas sobre el recaudo del próximo año, especialmente porque tienen como punto de partida unas metas de ingresos de 2024 que no van a cumplirse.

“Con la presentación del PGN para 2025, propusimos que había un espacio de austeridad entre $10,9 y $11,6 billones, desde una perspectiva del gasto en funcionamiento por tipo de entidad. Ahora, desde una perspectiva del ingreso y en medio del mal desempeño que ha presentado el recaudo en lo corrido de 2024, identificamos que persisten factores de incertidumbre sobre este rubro para el próximo año”, manifestaron.

En ese sentido acotaron que “el Carf indicó que la programación de ingresos para 2025 del PGN aumenta en $31,1 billones respecto a lo proyectado en el Marco Fiscal a mediados de junio, restándole credibilidad a la programación fiscal. Particularmente, esta mayor fuente de ingresos estaría sujeta a la aprobación del Proyecto de Ley de Financiamiento, pretendiendo recaudar $11,8 billones, una mayor gestión de la Dian que sumaría otros $14,6 billones al recaudo sobre los $14 billones ya mencionados en el Mfpm y $4,5 billones adicionales por mayores recursos de capital”.

Pesos colombianos

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En Corfi también se refirieron al proyecto de Ley de Financiamiento, y destacaron que la aprobación del proyecto está en vilo y “parece optimista” si se tiene en cuenta el ambiente que hubo en el Congreso durante las charlas del Presupuesto y que finalmente no fue aprobado por las comisiones económicas y deberá ser decretado por el presidente Gustavo Petro.

“Por lo tanto, anticipamos que el Congreso como máximo aprobará la aceleración del periodo de transición de la Regla Fiscal, lo que otorgaría al gobierno un margen adicional de gasto de $5,3 billones”, advirtieron.

Así las cosas, cerraron con el planteamiento de que si el “Gobierno decide decretar el PGN 2025 por un monto de $523 billones, prevemos que será necesario un ajuste de por lo menos $37,5 billones (2,0% del PIB) el próximo año para cumplir con la Regla Fiscal”.