Estados Unidos vive este viernes 24 de noviembre su gran jornada consumista conocida como el Black Friday, y aunque las famosas imágenes de multitudes buscando rebajas en las tiendas ya son poco frecuentes dada la comodidad de las compras por internet, esta fecha sigue siendo un termómetro de la salud de la economía de ese país.

Los consumidores estadounidenses enfrentan una prueba de su resiliencia durante el evento anual de compras, mientras buscan las mejores ofertas en medio de presiones económicas como mayores precios y tasas de interés cada vez más altas.

Pero las primeras señales indican que este podría ser un evento positivo para los minoristas en EE. UU.

Esta semana, un informe de Deloitte mostró que los consumidores planean gastar un promedio récord de 567 dólares durante los eventos de compras del Black Friday y el Cyber Monday, un 13% más que hace un año.

Mientras tanto, la Federación Nacional de Minoristas estima que 182 millones de personas planean comprar entre el Día de Acción de Gracias y el Cyber Monday, la mayor cantidad desde 2017.

La jornada se ha popularizado en varios países del mundo entre ellos Colombia que también tiene una amplia oferta de ofertas en sectores como tecnología, retail, compra de vuelos, entre otros.